Disfruta al máximo de la Navidad
Propuestas para vivir de verdad la Navidad
Nos disponemos a vivir unos días verdaderamente intensos, el ambiente de nuestras calles y hogares nos invitan a llenarnos de ilusión y alegría, ya ultimamos esos pequeños detalles que van a hacer que nuestras fiestas luzcan de verdad... Pero puede que se nos escape un detalle muy importante, y es que con tanto ajetreo, se nos puede olvidar quién es el protagonista de estas fechas, el sentido de nuestra celebración.
Al igual que no tiene sentido ir a la celebración del cumpleaños de un amigo y no felicitarlo, tampoco sería muy lógico celebrar la Navidad y olvidarnos del Señor. Por eso, y para que todo recobre su verdadero sentido, te proponemos 2 ideas:
La primera idea:
Vivir la Navidad en tu Parroquia.
Para ello cuentas con varias posibilidades, ya que celebraremos la tradicional Misa del Gallo
el día 24 de diciembre a las doce de la noche
y la Misa de Navidad
, el día 25 de diciembre a las 13:00
.
La segunda idea:
Hacer una bendición de la mesa especial.
No es necesario ser sacerdote para bendecir la mesa, puede hacerlo cualquier persona. Y aprovechando que estamos en familia, qué mejor que bendecir la mesa con una breve oración propia para estas fechas. Os dejamos una idea...
Dios de la Navidad y de todos los días, dador de todos los dones,
te damos gracias por las muchas maneras en que nos has bendecido.
Estamos agradecidos por cada persona reunida alrededor de esta mesa.
Bendícenos a nosotros, a nuestra comida y nuestra compañía.
Bendice a los que amamos que no están con nosotros.
Con gratitud y amor, nos acordamos de tu humilde nacimiento
a nuestras vidas y por tanto oramos por los que no tienen comida o familia
o amistad en este momento. Recordamos el establo en el que
Tú naciste y así oramos por aquellos que no tienen lugar para vivir.
Recordamos tu huida a Egipto y así rezamos por
los cristianos perseguidos y los refugiados en este momento.
Nos unimos a tus ángeles para dar gloria a Dios en las alturas
y en la oración por la paz y la buena voluntad en la tierra.
Ayúdanos a ver lo que realmente importa y a responder con fe, esperanza y amor.
Haz de nuestro corazón un pesebre en el cual colocar al niño Jesús.
Mantennos seguros y cerca de Ti en el año que viene.
Porque Tú eres nuestro Señor de la Navidad, ahora y por siempre. Amén.
Esperamos que disfrutéis al máximo de estas fiestas... pero siempre con el Señor.



